Las reformas fiscal y energética buscan abrir Pemex a extranjeros y beneficiar a EU
Jaime Avilés y Luis Javier Garrido, en el foro realizado en Casa Lamm sobre el fraude electoral Foto: Carlos Ramos MamahuaEMIR OLIVARES ALONSO
A un año del "fraude electoral", la alianza que lo planeó -PRI-PAN- continúa perjudicando los intereses de la ciudadanía, afirmó Claudia Sheinbaum, integrante del "gobierno legítimo" de Andrés Manuel López Obrador.
Al participar en el foro organizado por La Jornada y Casa Lamm la noche del pasado viernes, Sheinbaum alertó que tras conseguir la militarización del país, la impunidad para los soldados implicados en violaciones a derechos humanos y la aprobación de la Ley del ISSSTE (Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado), ahora irán por las reformas fiscal y energética, las cuales perjudican a la mayoría de los mexicanos.
Destacó que esa alianza no debe pasar desapercibida para los mexicanos, porque a consecuencia de ella llegó al poder "el que ahora se hace llamar presidente (Felipe Calderón).
"Sin el pacto PRI-PAN no se puede explicar de ninguna manera que seamos uno de los países más desiguales. No hay que olvidar que busca los intereses de Estados Unidos e involucra a todos los priístas y panistas".
En torno a la reforma fiscal, la secretaria del patrimonio nacional -del "gabinete legítimo"- señaló que los impuestos implícitos en esta propuesta van dirigidos a los empresarios medios, y que se sigue sin tocar a los conglomerados.
Sobre la reforma energética, alertó que "el miedo" que desde la clase política se está provocando en la sociedad, al advertir que los recursos petroleros se agotarán en menos de 20 años, es un método para modificar la ley y permitir la entrada de capital extranjero a Pemex, y con ello privatizarlo, con lo que "se estaría minando el futuro de los mexicanos".
Agregó que el Plan Nacional de Desarrollo presentado hace unas semanas por Felipe Calderón propone "de manera velada" reformas jurídicas para que se permita la inversión extranjera en la paraestatal, por lo que exhortó a quienes forman parte del movimiento del "gobierno legítimo" y a la sociedad en su conjunto a no permitirlo. "¿Qué sería de nuestro movimiento si dejamos que se privatice Pemex? La paraestatal sí tiene futuro, basta con hacer una reforma fiscal para que el hombre más rico de México pague lo que tenga que pagar y con ello se generen recursos para invertir en la extracción del energético".
Sheinbaum realizó un análisis de lo sucedido a más de un año del "fraude electoral", poniendo énfasis en la evolución del movimiento encabezado por López Obrador, y llamó a no desesperarse en el objetivo de que Calderón caiga.
Destacó que "no es poco" que a un año de los comicios del 2 de julio de 2006 la resistencia se haya mantenido. "No es poco que a un año tengamos un dirigente que diga: 'aquí estoy, y no voy a transar'. No es poco que haya un millón de personas registradas en el gobierno legítimo, aunque eso no quiere decir que tengamos ganada la batalla".
Por ello, llamó a que dentro de este movimiento no se presente la intolerancia, la cual ha reducido a "históricos movimientos de izquierda"; sin embargo, advirtió que debe ponerse atención a las traiciones que puedan presentarse en el mismo. "Si no nos convencemos de que la batalla es pacífica, ésta no va a tener futuro".
En su turno, Jaime Avilés, colaborador de esta casa editorial, subrayó que el "clientelismo" está alejando a algunos integrantes del PRD del movimiento encabezado por López Obrador, aunque reconoció que esto no debe preocupar, sino llenarnos de alegría, pues así "se eliminará a personajes que no valen la pena".
Dijo que "a un año del fraude electoral, lo que sucede en el gobierno federal hace pensar lo peor", pues destacó el caso del chinogate y la impunidad ante los excesos cometidos por militares. Pero también advirtió que dentro del mismo perredismo se están presentando acciones en contra del movimiento de resistencia, con la reunión de cuatro de los cinco gobernadores de ese instituto político con Calderón, así como con la postura de algunos legisladores de que se debe negociar con la administración federal.
Destacó que la postura del jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard, "merece un reconocimiento", pues se ha mantenido en no negociar con "el pelele". Alertó que el único funcionario de quien se debe tener dudas en el GDF es el procurador Rodolfo Félix Cárdenas, por lo que exhortó a la ciudadanía a recordar su pasado y mantenerse atentos a su labor.
Por su parte, Luis Javier Garrido, integrante del Instituto de Investigaciones Sociales de la UNAM, aseveró que "frente al gobierno de la minoría no se puede tener una actitud timorata", por lo que la "clave" en el momento político actual es que las definiciones para el país no deben basarse más en medias tintas.
Agregó que pese a que Calderón "ha tenido pequeños logros" en su ofensiva contra la oposición, "ha fracasado en su intento por desintegrar la unidad del Frente Amplio Progresista".
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