El agua del Santiago es tóxica

Confirma un estudio que contrató la Comisión Estatal del Agua

El Zula y el Santiago reciben 217 descargas. La mayoría, 119, domésticos; 46 son de origen industrial; 28 mixtos; 16 pecuarios y 8 pluviales.

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Publico

No es sólo su excremento y el mío. También son heces de cerdos y de aves. Y ojalá sólo fuera eso. Pero no: hay metales pesados ¿Le suenan el plomo y el mercurio? Y cianuro. Y aguas tóxicas. El resultado es un río medio vivo, el Zula y un río semimuerto, el Santiago.

Caudalosos, sí, pero podridos.

No es un cuento de los organismos ecologistas: bueno fuera. Es el resultado de una investigación que una dependencia del gobierno de Jalisco, la Comisión Estatal del Agua (CEA), mandó hacer a la empresa AyMA Ingeniería, durante el estiaje de 2006. Los resultados están en la página www.ceajalisco.gob.mx.

Alimentado por el río Los Sabinos (también parte del análisis) el Zula nace en Arandas, Jalisco y desemboca en la margen derecha del Santiago, casi en el lago de Chapala. De ahí, el Santiago recorre 580 kilómetros de Jalisco y Nayarit, hasta el Océano Pacífico.

La zona de estudio del CEA involucra a trece municipios jaliscienses: Arandas, Atotonilco, Ocotlán, Tototlán, Poncitlán, Zapotlán del Rey, Chapala, Ixtlahuacán de los Membrillos, Juanacatlán, Tlajomulco, El Salto, Zapotlanejo y Tonalá.

Ahí, el Zula y el Santiago reciben 217 descargas. La mayoría, 119, domésticos; 46 son de origen industrial; 28 mixtos; 16 pecuarios; 8 pluviales, encontró AyMA Ingeniería.

La investigación reveló un mundo… raro: que muchas de las llamadas plantas de tratamiento de aguas residuales municipales (PTARM) arrojan a las afluentes el agua sin tratar. Que algunas de las industrias trasnacionales de esa región arrojan a las afluentes el agua sin tratar. Que en otros casos, el agua “tratada” es tóxica.

Algunos ejemplos: los lixiviados —los jugos venenosos— de la descomposición de las dos mil toneladas diarias de basura que los habitantes de Guadalajara enviamos al vertedero Los Laureles, concesionado a la empresa Caabsa Eagle. Las descargas de la aceitera AGyDSA. Los desperdicios de la trasnacional Nestlé: “la planta de tratamiento es de tipo biológico, sin embargo el vertido tenía características que denotaba que se estaba derivando el agua sin tratamiento, ya que incluso la descarga estaba caliente”. Otras, que violan los parámetros establecidos por las normas oficiales mexicanas: Genpro, Ciba, Celanese, Santorini.

No es sólo su excremento ni los únicos afectados son los habitantes de El Salto y Juanacatlán. En algunos casos, el agua podrida sirve la regar las legumbres y hortalizas que usted se come.

Continuará…