Crónica: Premio Jalisco
En sus intervenciones, Patricia Medina y Esteban Hernández defendieron la educación.
Maricarmen Rello Publico - 20-Diciembre-06
Lo dijo Patricia Medina, desde sus 25 años de trayectoria literaria: “No se diga en voz alta que educar a los mexicanos es un gran desperdicio de recursos”. Lo dijo, también, el bailarín Esteban Hernández, desde la lozanía de sus doce años: “Ojalá que no muchos consideren la cultura como algo secundario. Y por el bien de todos nosotros, primero la educación y la cultura”. Separados generacionalmente, ambos coincidieron ayer en el patio del Palacio de Gobierno para recibir, de parte de las autoridades estatales, el Premio Jalisco al Mérito Literario la primera y el Premio Estatal de la Juventud en el Ámbito Cultural el segundo. Y aunque varió la forma, el fondo del discurso fue el mismo.
Además de Patricia Medina, recibieron el Premio Jalisco Ignacio Mariscal, José Ojeda, José Guerrerosantos y la Benemérita Sociedad de Geografía y Estadística. Según el diploma, el reconocimiento llega “por su distinguida trayectoria y participación en beneficio de la comunidad jalisciense”. Y aunque, como dijo Medina, era un día para “sonreír y tomarse la foto”, la poeta aprovechó el micrófono para convocar a “científicos, intelectuales, sociólogos, artistas, técnicos y viejos profesionistas” para “coordinarnos en una nueva estructura de poder”.
Sin declaraciones similares, José Ojeda, cuchillero de Sayula, señaló que el premio “lo impulsa a uno a no quedarse ahí, sino buscar la forma de seguir trabajando con más ganas y hacer cosas más bellas”. Y es que, como dijera en alguna ocasión Patricia Medina, las cosas que llegan del agua van de regreso a ella: la también editora, por ejemplo, utilizará los 55 mil pesos que otorga el galardón para seguir publicando libros. El bailarín Esteban Hernández continuará su ahorro para, un día, poder irse a Estados Unidos a continuar con su formación. José Ojeda, en cambio, comparará “una máquina para que no se me acabe la que tengo, seguir generando mis piezas y buscar una forma de superarnos cada día”.
Tarde o temprano los galardones llegan. Y ayer fue el día para la Benemérita Sociedad de Geografía y Estadística, fundada en 1833 y que, por fin, recibió el Premio Jalisco. “Muchos miembros de la sociedad han sido ya reconocidos de manera individual, pero es la primera vez que se le entrega a la institución. Es un reconocimiento que llega en su momento, aunque no lo buscamos. Lo que queremos es seguir sirviendo a la sociedad”, dijo su presidente Armando González Escoto.
A la cita falló, “por sus diversos compromisos”, la golfista Lorena Ochoa, ganadora del Premio Estatal de la Juventud en el Ámbito Deportivo. Sonrientes, los galardonados fueron felicitados por amigos, familiares y uno que otro funcionario. Al final, no faltó quién pidió una copia del discurso de Patricia Medina.
En sus intervenciones, Patricia Medina y Esteban Hernández defendieron la educación.
Maricarmen Rello Publico - 20-Diciembre-06
Lo dijo Patricia Medina, desde sus 25 años de trayectoria literaria: “No se diga en voz alta que educar a los mexicanos es un gran desperdicio de recursos”. Lo dijo, también, el bailarín Esteban Hernández, desde la lozanía de sus doce años: “Ojalá que no muchos consideren la cultura como algo secundario. Y por el bien de todos nosotros, primero la educación y la cultura”. Separados generacionalmente, ambos coincidieron ayer en el patio del Palacio de Gobierno para recibir, de parte de las autoridades estatales, el Premio Jalisco al Mérito Literario la primera y el Premio Estatal de la Juventud en el Ámbito Cultural el segundo. Y aunque varió la forma, el fondo del discurso fue el mismo.
Además de Patricia Medina, recibieron el Premio Jalisco Ignacio Mariscal, José Ojeda, José Guerrerosantos y la Benemérita Sociedad de Geografía y Estadística. Según el diploma, el reconocimiento llega “por su distinguida trayectoria y participación en beneficio de la comunidad jalisciense”. Y aunque, como dijo Medina, era un día para “sonreír y tomarse la foto”, la poeta aprovechó el micrófono para convocar a “científicos, intelectuales, sociólogos, artistas, técnicos y viejos profesionistas” para “coordinarnos en una nueva estructura de poder”.
Sin declaraciones similares, José Ojeda, cuchillero de Sayula, señaló que el premio “lo impulsa a uno a no quedarse ahí, sino buscar la forma de seguir trabajando con más ganas y hacer cosas más bellas”. Y es que, como dijera en alguna ocasión Patricia Medina, las cosas que llegan del agua van de regreso a ella: la también editora, por ejemplo, utilizará los 55 mil pesos que otorga el galardón para seguir publicando libros. El bailarín Esteban Hernández continuará su ahorro para, un día, poder irse a Estados Unidos a continuar con su formación. José Ojeda, en cambio, comparará “una máquina para que no se me acabe la que tengo, seguir generando mis piezas y buscar una forma de superarnos cada día”.
Tarde o temprano los galardones llegan. Y ayer fue el día para la Benemérita Sociedad de Geografía y Estadística, fundada en 1833 y que, por fin, recibió el Premio Jalisco. “Muchos miembros de la sociedad han sido ya reconocidos de manera individual, pero es la primera vez que se le entrega a la institución. Es un reconocimiento que llega en su momento, aunque no lo buscamos. Lo que queremos es seguir sirviendo a la sociedad”, dijo su presidente Armando González Escoto.
A la cita falló, “por sus diversos compromisos”, la golfista Lorena Ochoa, ganadora del Premio Estatal de la Juventud en el Ámbito Deportivo. Sonrientes, los galardonados fueron felicitados por amigos, familiares y uno que otro funcionario. Al final, no faltó quién pidió una copia del discurso de Patricia Medina.
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