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jueves, marzo 01, 2007

Ramírez Acuña, culpable; veredicto del tribunal popular instaurado para juzgar al secretario de Gobernación



El tribunal popular instaurado para juzgar la actuación de Francisco Ramírez Acuña al frente de la pasada administración estatal, encontró culpable al ex mandatario y ahora secretario de Gobernación, de los delitos de tortura, desaparición forzada de personas en forma transitoria Foto: ARTURO CAMPOS CEDILLO

Organismos civiles lo compararon con Adolfo Hitler por sus métodos represivos fascistas

Piden a la Suprema Corte de Justicia de la Nación investigue los hechos que se le imputan

JUAN CARLOS G. PARTIDA - Jornada Jalisco

El juicio popular que ONG jaliscienses realizaron ayer públicamente en Plaza de Armas decretó culpable de mal gobierno al ex gobernador y secretario de Gobernación Francisco Ramírez Acuña. En medio de un dispositivo de seguridad que tiene literalmente cercado al Congreso del Estado ante el anuncio de diversas manifestaciones este jueves durante la ceremonia de toma de protesta al nuevo gobierno estatal, los organismos civiles señalaron en particular que el ex gobernador es un represor y lo compararon con Hitler por sus “métodos fascistas represivos”.

Al menos una veintena de policías municipales de Guadalajara impidieron que los manifestantes instalaran a tiempo sus mesas de trabajo, pancartas y equipo de sonido, lo que provocó por algunos minutos una tensión que incluso devino en jaloneos, sin que pasara a mayores ni algún manifestante fuera arrestado. Casi dos horas después de lo anunciado, el Tribunal Popular inició su sesión que culminó con la declaratoria señalada.

“Existen suficientes testimonios, evidencias y pruebas para determinar la presunta responsabilidad administrativa, política, penal y civil del inculpado Francisco J. Ramírez Acuña, alias Paco el Opaco, por delitos cometidos en el desempeño de su cargo de gobernador del estado, durante el período del primero de marzo del 2001 al 28 de febrero del 2007, derivados de actos de omisión, promoción, tolerancia o aquiescencia, y por los delitos que resulten tipificados en las leyes nacionales, estatales e internacionales dentro del marco de los derechos humanos, tan graves como los de lesa humanidad en las modalidades de tortura, desaparición forzada de personas en forma transitoria, y apartheid, así como delitos ambientales en la modalidad de ecocidio”, dice la primera de las conclusiones a las que llegó el grupo integrante del Tribunal Popular.

Los organismos y personajes que se erigieron como juzgadores fueron la Coordinadora Estatal del Movimiento Urbano Popular, Frente Popular Revolucionario, Movimiento de Bases Magisteriales, Movimiento de Afectados por las Presas y en Defensa de los Ríos, Azkiles de Protección Civil, Cultura y Derechos Humanos, Colectivo Cuatro Vientos, El Barzón Regional, Colectivo Ecologista de Jalisco, AC, Consejo Indígena Campesino, Centro de Atención al Migrante, Asociación Nacional de Abogados Democráticos, Coordinadora Intersindical Democrática Jalisciense, Partido Popular Socialista de México, CIJALO, Colectivo Rodolfo Reyes Crespo, Fuerza Socialista, Redes Ciudadanas, Coordinadora 28 de Mayo y Liga Mexicana para la Defensa de los Derechos Humanos.

El jurado popular erigido ayer mismo para hacer el juicio lo integraron Manuel García Navarro, José Vázquez Villaseñor, María del Rayo Calderón García, Oscar González Garí, Jorge Ceja Martínez, Mónica Pérez Taylor y Martín Márquez Carpio. Como moderador estuvo Adrián Ramírez López.

“Este Tribunal siendo benevolente, sin afán alguno de venganza, insta al C. Francisco J. Ramírez Acuña, alias Paco el Opaco, a que presente su renuncia al cargo de secretario de Gobernación y manifieste su voluntad de no volver a ocupar ningún cargo público en los tres Poderes y niveles de gobierno. Le insta igualmente a que reconozca la responsabilidad en la comisión de los diversos ilícitos y delitos que se le imputan, y pida disculpas públicas a las víctimas, al pueblo de Jalisco, al de México y a la comunidad internacional, estableciendo el compromiso de no repetición. En caso de que sea omiso a estos exhortos, este tribunal insta a las autoridades federales encabezadas por el presidente Felipe Calderón Hinojosa, a que proceda a la destitución inmediata del inculpado del cargo de secretario de Gobernación e instruya al Procurador General de la República para que inicie –de oficio– las investigaciones correspondientes con base al marco jurídico vigente y a los tratados”, señalan también las conclusiones.

También se instó al Poder Legislativo del Estado a que inicie las investigaciones correspondientes para instaurar el juicio político o de procedencia contra Ramírez Acuña, se pidió a la Suprema Corte de Justicia de la Nación que en el ámbito de sus facultades y atribuciones constitucionales investigue los hechos que se le imputan al inculpado.

“Se invita a la Comisión Nacional de Derechos Humanos y a la Estatal de Jalisco a que aporten a este Tribunal Popular los elementos que obren en sus archivos y expedientes para que las víctimas y ciudadanos quejosos las hagan valer ante los tribunales competentes, pues de no hacerlo incurrirán en encubrimiento favoreciendo la impunidad. Se insta a las organizaciones internacionales y no gubernamentales a que aporten los elementos de juicio ante la presente causa y sumen esfuerzos en la lucha contra la violencia, la corrupción y la impunidad. Exhortamos a los organismos como la Organización de las Naciones Unidas, a la OEA, la OIT, la OMS, etcétera, a que interpongan todos sus recursos y medios para la presente causa.

“Se hace énfasis para que el presente caso sea objeto de una atención particular por parte de la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) en su próxima visita (in loco o in situ) a nuestro país. Invitamos y convocamos a los colegios, barras, federaciones y escuelas de abogados, a las universidades asentadas en el estado, a que contribuyan a la ampliación y el perfeccionamiento de la presente causa. Finalmente, llamamos al pueblo de Jalisco, al de México y a la comunidad internacional a que interpongan todos sus recursos y voluntad para que ningún espacio público o monumento lleve el nombre de Francisco J. Ramírez Acuña”, concluye el resolutivo presentado al final del ajetreado evento.

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