Opinión - Marcela Gomez Zalce

La Neblina del IPAB

• El club de Bobby
• Y sigue el EPR dando...

Publico

La claridad consiste, mi estimado, en una distribución adecuada de luz y sombra. Al cierre de la divertida semana, la simpática lista de personajes a los cuales Felipe Calderón deberá pagar su cuota corre$pondiente por poner su granito de arena electoral sigue siendo grande.

El entretenido problema, my friend, es que al no alcanzar el botín, habrá motín. Y respecto al oscuro caso de la venta de Aeroméxico a la pandilla encabezada por Roberto Hernández y los autores intelectuales del delicado espoteo que fue el verdadero peligro para México, la otra lista, la de los damnificados, no deja de ser atractiva.

Por un lado la familia Saba quienes, junto a Gastón Azcárraga, están, digamos, algo enchilados que, al tiempo, harán su particular acuse de recibo. Por las formas que, ya sabe, dijeron todo del fondo. Las distintivas formas de Calderón, su Gymboree y el IPAB para entregar la simpática línea aérea.

Porque una de las preguntas incómodas para masticar el fin de semana (con drink en la mano) es: ¿qué no fue precisamente el IPAB la dependencia que favoreció a los jijastros Bribiesca Sahagún...? O ¿ya se olvidó que en abril de 2006 aparecieron tres cheques que develaron la relación de confabulación entre estos impresentables juniors, Manuel y Jorge, con Construcciones Prácticas, propiedad de su cuate Miguel Khouri, y el impecable IPAB que los benefició con su proceso de venta de cartera vencida...? ¿Por qué el irreverente respetable habría de comerse la gran historia de éxito en la puja empresarial por Aeroméxico donde el árbitro estaba completamente descalificado por su oscuro proceder en el pasado?

Sobre todo por los personajes involucrados. Ayer los hijos de la ambiciosa primera dama y hoy los patrocinadores electorales de Felipe Calderón. O ¿creerán que somos unos imbéciles...?

O quizá, mi estimado, como sentenciaría el sol naciente del equipo azul-amarillo michoacano encabezado por Leonel Godoy, Cuauhtémoc y Lázaro Cárdenas, estamos mal de nuestras facultades mentales. O sea, estamos locos (o pendejos) si no nos damos cuenta de que Calderón gobierna, que es presidente y del empleo faltaba más (¿qué no se fijó que las cifras de este 2007 están superadas?) por supuesto jefe supremo de las fuerzas armadas, indiscutible cabeza (y dedito) única del PAN y en una de ésas, marido devoto y ejemplar.

Así que cómo rayos hay el atrevimiento de dudar de la transparencia en el reciente cochinero aéreo, pues. No sea pesimista, carajo. Al contrario.

Siéntase orgulloso, my friend, ya que hoy México cuenta en sus filas con esa red de distintivos empresarios dignos de ser miembros del selecto Wings Club.

Pero no se me confunda, no el de la cafetería ( no sea naco) no, no... el club de Toby de los dueños de todas las líneas aéreas. Y todo gracias a un granito de arena electoral...

Y como se ve que la suerte alegra al inquilino de Los Pinos, en una de ésas y el proceso para entronizar a Germán Martínez en Acción Nacional sale igual de bonito que la venta de Aeroméxico. Germán ha dicho que no quiere ser candidato de unidad... sino construir un CEN de unidad. Donde el mundo azul vuelva a ser como antes. Donde el partido pertenezca a los de sangre... azul. Aunque antes hay que borrar del mapa y aniquilar con yunque a Manuel Espino.

No importa si en esta desafortunada maniobra violamos nuestra palabra si encarrerados le dimos en la madre a nuestros estatutos, y qué tanto es tantito.

Falta, claro, ese incómodo detalle llamado Vicente Fox donde lo que le vamos a dar es esperanza... sí, sí... Esperanza (con mayúsculas) pero aderezada con revolución para que aprenda a respetar porque el que se va se calla.

Chistoso.

Callar: Enmudecer, silenciar, esconder, tapar, encubrir.

Aquí lo único en donde se van a tener que aplicar en hacer, my friend, es callar a los protagonistas del reventón del 2 de julio de 2006. Y por lo pronto, la banda de Roberto ya tiene juguete nuevo. Aunque para un banco no sea el mejor de los negocios, pero sí la condecoración de los egos.

Otro delicioso acierto en la dieta de Felipe Calderón a quien, por cierto, ayer el EPR le envió una dosis de C-4 recordándole que porfa, no los olvide, se ponga las pilas y evite la escalada en la campaña nacional de hostigamiento...

Así que fájese los pantalones, haga la pregunta correcta, a la persona adecuada en esa distinguida cadena quien presionará a los traviesos para la entrega... del mapa. ¡Adiós!