Aunque el modelo neoliberal ha despertado la resistencia en Latinoamérica, aún no se sabe cuál ha sido el avance, destacó el pensador Emir Sader Foto: ARTURO CAMPOS CEDILLO
JORGE COVARRUBIAS
“¿Qué será el posneoliberalismo?”, se cuestionó Emir Sader, uno de los pensadores más influyentes de América Latina en el campo de las ciencias sociales, quien se presentó ayer en el auditorio Salvador Allende del Centro Universitario de Ciencias Sociales y Humanidades de la Universidad de Guadalajara, en la continuación del vigésimo sexto Congreso de la Asociación Latinoamericana de Sociología (ALAS).
“Difícilmente será socialista, por el retraso histórico, también porque la historia se hace siempre por vías heterodoxas contra el capital”, contestó el catedrático, durante su ponencia titulada Posneoliberalismo y políticas públicas.
Explicó que en América Latina el modelo neoliberal ha motivado una resistencia que se ha dado desde el plano teórico y en la práctica a través de movimientos sociales, sin embargo aún no se sabe cuanto “hemos avanzado”.
“Tenemos que preguntarnos qué tanto hemos logrado avanzar en alternativas, qué tanto podemos decir con este pensamiento crítico. No podemos estar contentos”.
Emir Sader vaticinó que por un tiempo se producirá una “gran turbulencia”, como consecuencia del agotamiento del modelo neoliberal, y la ausencia de una izquierda que pueda hacerle frente a los problemas sociales.
“Nunca el capitalismo fue tan funeral, y nunca el socialismo fue tan débil, nunca desde que se forjó la palabra izquierda, ésta fue tan débil, ¿dónde está la izquierda?, en Europa Occidental, donde nació”.
El catedrático, hijo de inmigrantes libaneses, pero nacido en la ciudad de Sao Paulo, Brasil, precisó que el combate al neoliberalismo implica hacerle frente a tres grandes monopolios que articulan en la actualidad el poder mundial: las armas, el dinero y la palabra. Por consiguiente es necesario afinar el marco teórico de América Latina, renovarlo y ponerlo al servicio de la lucha del posneoliberalismo.
“Luchamos contra el poder del dinero, para hacer una construcción de alternativas al modelo neoliberal, que trata de transformar todo en mercancía, donde todo se vende, todo se compra, todo tiene un precio, construir las otras palabras, las palabras de los que no tienen palabra”, abundó.
En su opinión tres países de América Latina comienzan a transitar por la ruta del posneoliberalismo, Ecuador, Venezuela, y Bolivia, siendo este último el más significativo porque rescata en su proyecto izquierdista la lucha de los indígenas, mineros, y el pensamiento de Ernesto Che Guevara.
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