-Se escuchó la voz de un asistente: "¡Usted es una asesina! ¡Usted mató al profesor!". La maestra, visiblemente nerviosa expuso: "Es muy lamentable, con todo respeto les pido (sic) disculpas, no por mi conducta, sino porque haya gente que todavía no entiende que la transformación empieza..."Por : Rocío Arenas.
Amigos maestros: ahora sí a la que le fue como en feria fue a doña Elba Esther Gordillo. La maestra fue invitada a una serie de conferencias patrocinadas por Tequila José Cuervo y en su presentación en la Universidad de California en San Diego (UCSD) y apenas iniciada “la clase” de política que había preparado la presidenta del SNTE, un estudiante se dirigió a ella espetándole que era una corrupta ultraderechista. Inmediatamente personal de seguridad de la propia universidad se encargaron de poner de patitas en la calle al chico irreverente.
La maestra se vio sorprendida por la acusación y logró decir: “Esa es la voz de la democracia”. “No tengo nada de que avergonzarme, solo soy una humilde maestra”. Cuando todo parecía volver a la normalidad y la maestra se había recuperado de dicha acusación, otro estudiante comenzó a leer un escrito en el cual señalaba a la maestra Elba Esther como responsable de la muerte del profesor Misael Núñez Acosta, asesinado a balazos en el año de 1981. Este inconforme con la visita de la señora a la UCSD corrió la misma suerte que su compañero; y policías del campus lo sacaron no sin antes gritar ante todos los presentes: "¡Ya cayó, ya cayó, Ulises (Ruiz) ya cayó… Oaxaca vive, la lucha sigue!"
Ante estas protestas, la profesora atinó a decir: "Yo no tengo nada que ver con eso, yo no soy gobernadora de Oaxaca", y al mismo tiempo explicó que Ulises Ruiz es del grupo de Roberto Madrazo, con quien ella rompió antes de las elecciones de 2006. La “ticher” continuó su interrumpida conferencia sobre la política mexicana: "Si bien es cierto que la política me gusta, no me gusta como está, soy de las que creen que se debe transformar…" De nuevo vino otra interrupción: Pero esta vez se trato de un señor que estaba entre el público y le soltó: "Usted es una mujer corrupta de México, no tiene calidad moral aquí, quien le da los premios es la ultraderecha, toda esta gente vendida, pero usted es una corrupta, usted tiene mucho que ver con las muertes en Oaxaca, del profesor Acosta, acuérdese que mandó matar al profesor Acosta", la acusó el señor.
Avergonzado con lo que estaba sucediendo en el auditorio de la UCSD, el anfitrión del evento Jeffrey Davidow, ex embajador de los Estados Unidos en México, se acercó al señor para pedirle que se fuera. "Y usted es una ultraderechista", le replicó el desalojado manifestante. Cuando la presidenta del sindicato más poderoso de América intentó proseguir su interrumpida conferencia, le tocó el turno a dos chicas inconformes con la presencia de la profesora y comenzaron a gritar a voz en cuello: "¡Asesina, asesina!" Ella alzó la voz y siguió hablando: "Lo que pasa en México es complejo, porque existen circunstancias que no permiten que visualicemos con claridad lo que está pasando, afirmó…"
Cuando las dos muchachas eran retiradas, desde el fondo de la sala otro señor insistía: "¡Es usted una asesina!" También lo sacaron. Al explicar que eso de las interrupciones y señalamientos en su contra es natural para ella, la maestra continuó su discurso. "Habría que entender el fenómeno de los cambios y las transformaciones en México desde la perspectiva clara y profunda de que la participación ciudadana ha sido muy limitada, no surgen las instituciones por demanda de la sociedad… (desde afuera del salón se escuchaban los gritos de protesta contra Gordillo). En estos nuevos tiempos hay un cambio enorme en el país, y ese cambio tiene resistencia como las voces que aquí escuchamos, yo creo que no son voces de mala fe, no creo que son voces que tengan la intención de lastimar, son voces de ignorancia, de incomprensión, de que verdaderamente no están enterados de la realidad que estamos viviendo".
Cuando la maestra parecía haber superado y controlado al auditorio; de nuevo otra intervención del público: "No queremos que trate de engañarnos con su política", le gritó una mujer. Gordillo calló y la dejó hablar: "Ustedes son parte de la cúpula del poder de ahora, algún día va a ser todo muy diferente, porque seguimos luchando por nuestro pueblo, por el auténtico, por los indígenas, por los obreros, por los campesinos. ¡Oaxaca vive!". La maestra de nuevo explicó: "Esas voces las he escuchado hasta dentro de mi propio partido, del partido que yo militaba, del que fui expulsada por plena convicción, por ser una voz disidente, por querer que el PRI se adecuara a los nuevos tiempos".
Se escuchó la voz de otro de los asistentes: "¡Usted es una asesina! ¡Usted mató al profesor!". La maestra, visiblemente nerviosa expuso: "Es muy lamentable, con todo respeto les pido (sic) disculpas, no por mi conducta, sino porque haya gente que todavía no entiende que la transformación empieza", decía la maestra mientras los gritos del hombre se seguían escuchando. Terminó diciendo: "Es muy fácil señalar a alguien, pero es muy difícil comprobarlo", puntualizó la mujer más poderosa de México. Y remató: "Ese es México, el México de ese grito, de esas voces, de esas voces de intransigencia, de esas voces que no quieren ninguna transformación".
Tras definirse como una gran reformadora, la maestra Elba Esther hizo un diagnóstico de la democracia mexicana y aseguró que no hay tiempo para sacar una reforma de Estado. Según sus cálculos, podrá avanzarse en una reforma electoral que permita "convertirnos en una democracia moderna". Señaló que no hay un déficit de empleo y que no hay opciones posibles de desarrollo sin las reformas estructurales. Recordó que trabajó en el sexenio de Vicente Fox para esas reformas. La maestra respondió a todas las preguntas del público, incluso a quien le preguntó como había adquirido una casa en San Diego. "Mi madre la compró hace 30 años", respondió, y dijo que desde joven ha sido muy ahorradora y cuando era profesora tenía empleos extras para solventar sus gastos.
Así pues, amigos maestros, entre gritos de ¡asesina, asesina, corrupta, ultraderechista, que le increparon activistas del grupo 'Vamos por Oaxaca', estudiantes y público en general, la famosa “ticher” se presentó el jueves pasado en el auditorio del Instituto de las Américas, en La Jolla.
La maestra, a pesar de las manifestaciones de protesta en su contra, ofreció una plática sobre la necesidad de llevar a cabo un verdadero cambio social y político en México. Lo que sí fue cierto en esa conferencia; es que a la famosa “ticher” le fue como en feria. Comentarios : rociarenas17@hotmail.com
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