Columna

Código Político
Germán Robles
14 de enero de 2008

PRD: Cuando perder es avanzar. Los golpes como causa y fin.

Carlos Navarrete, en su posicionamiento en tribuna, durante la sesión del Senado de la República el pasado 12 de septiembre -cuando fueron aprobadas una serie de reformas políticas con rango constitucional en la llamada reforma electoral-, peroró unas palabras que bien podrían ser la quinta esencia del PRD: “a punta de golpes, hemos aprendido en la democracia, es como hemos construido los avances”.

Eso mismo. Lo dijo Navarrete pero lo pudo haber citado cualquier otro perredista y el mensaje sería el mismo; es decir, para los amarillos no importa ganar o perder el poder político, sino en base a golpes –léase fraudes, ergo antidemocracia- se puede ganar en materia de reformas democráticas y “avanzar”. Y esta historia se remonta a los tiempos cuando se daba el despertar democrático en México a fuego y sangre; desde la guerrilla, desde la clandestinidad.

Hasta que López Portillo en un afán de legitimarse políticamente -pues había ganado una elección en solitario-, promulgó una reforma política en 1978, se creó entonces el Colegio Electoral, que a la postre sacaría del exilio a la izquierda y le pondría curules plurinominales para tener por primera vez en su historia espacios reales de poder desde el congreso, incluso dándole registro formal al Partido Comunista. Sí, hasta ahí, en base a golpes se pudieron capitalizar los avances.

Desde entonces la izquierda comenzó a aprender el arte de la negociación con el poder del antiguo régimen priísta, y efectivamente de manera legítima ganó posiciones y sus causas se derivaron por la vía institucional. Pero luego vino la etapa “termidoriana” de la izquierda política y electoral mexicana, pues se convenció de que la vía –conformista- democrática y las urnas eran el camino, ¿y que, eso no es lo correcto? Si, aunque poco efectivo, y más si quienes tomaban la vanguardia eran viejos y resentidos priístas que rompieron con el régimen, crearon el FDN impeliendo a todas las tribus y corrientes de izquierda a construir la candidatura en torno a Cuauhtémoc Cárdenas. Así, el PRD desde su origen hasta hoy en día no es más que la fallida construcción de una Constantinopla priísta.

Vino el fraude a favor de Salinas, el FDN después tronó por desacuerdos, nació el PRD y la izquierda político electoral contemporánea. Se dio origen a la “concertacesión”: otro golpe, otro fraude; los disidentes e ideólogos incorruptibles –más de 500- no “fueron vistos, ni escuchados” pues fueron asesinados y desaparecidos impunemente. El resto vendió su conciencia al salinismo, al sepultarla a piedra y lodo siguiendo las enseñanzas de la escuela “democrática” de Cardenistas, Lombardistas y de Castillo Peraza. Así, ¿para qué obtener la presidencia?, si el mismo régimen en turno les garantizaba y -les garantiza- la subsistencia política y el sostén.

Y en todos estos procesos uno de los estrategas comunes fue Porfirio Muñoz Ledo, hombre ávido y maestro de la operación política, mismo personaje, pero trashumante de partidos, de siglas, de puestos que cuestionan mucho su congruencia y así mismo la memoria de quiénes al día de hoy lo apoyan de manera incondicional en el nuevo puesto que le asignó López Obrador como el nuevo coordinador en jefe del FAP.

Y es que al final en el PRD, en estos momentos de crisis, no aprenden de su historia y sólo terminan reeditándola, incapaces de definir su propio pragmatismo, de eliminar viejas tendencias caudillistas, de debatir ideas, crear consensos y conciliaciones mínimas. ¿Y de la mezquindad característica?, esa no parece tener solución. Por ello, al parecer para muchos perredistas como para la corriente de los “Chuchos” encabezada en el Senado por Carlos Navarrete, soslayar los fraudes electorales y la antidemocracia es la forma de “avanzar” en reformas de calado democrático.

El fraude del 2006 del dos de julio, es el precio de la reforma electoral. Pasó en el 76, en el 88, en el 2006, y seguirá pasando en tantas elecciones y sexenios vengan. Y ¿que importa?, "si a punta de golpes se dan las grandes reformas". Ayer le llamaron el FDN, ahora el FAP y mañana otro será el mamotreto nominal, ¿Y la presidencia?, ¿para qué? De mantenerse esa mentalidad se seguirá demostrando en la práctica que los días “2 de julio. Si se olvidan”. Tan ridículo como celebrar que quién nos haya robado nuestra casa nos haya hecho el “favor” de devolvernos la sala. Así de ridículo. Y no se discute la importancia de reformas como la electoral, sino la mentira, la hipocresía de los amarillos. De esa izquierda alcahueta que mercadea los “avances” a un alto costo.

De nada vale hablar por separado de “Chuchos”, del FAP, de la resistencia civil y la CND, de López Obrador, al final, todos pierden cuando se minan los principios de la cultura democrática, se repiten los esquemas de resabios priístas, se cometen torpezas y desaparece la autocrítica de todas las partes en ese ente llamado izquierda política.

Sigue la escandalera.

Por el cese del programa de radio en la W de Carmen Aristegui, que si bien es una afronta a la libertad de expresión e información para todo el público como para la propia periodista, en el fondo no es más que un ajuste de cuentas aplicado a un actor mediático- político como Carmen Aristegui, por el grupo español Prisa. La periodista fue la carta que el grupo Prisa reservo a López Obrador en caso de que este llegara al poder. Ese “corte de caja” sólo sirve para balancear la relación entre el grupo Televisa y el poder pasado el procesamiento del 2 de julio, ya con Fox fuera y entrado en funciones el "presidente legal" -cosa que la misma Carmen anticipaba- ; así las piezas del ajedrez de la lucha por el poder y medios regresan a su lugar.

La señora Aristegui bien que mal tiene trabajo de sobra. Lo que habría que hacer es dejar de sintonizar los medios del grupo Televisa y dejar de politizar y mediatizar un asunto que va más allá de una periodista particular y la libertad de expresión per se. Cabe señalar que temas como el alza a los precios de varios insumos básicos, al transporte público, entre otros son más importantes, en eso se debería de concentrar el izquierdismo escenográfico al hacer sus convocatorias antes que ir a reclamar a los oídos sordos de los ejecutivos de las filiales de Televisa Radio.

En el tintero.

La fábrica de idiotas, el grupo Televisa, trabaja ya en Jalisco el plan B de promoción política del gobernador Emilio González Márquez hacia el 2012 -o hasta donde le alcance-, y es que derivado de la publicación en el diario oficial de la reforma electoral promulgada por el G-3, los gobernadores como Emilio a falta de los spots políticos, si tendrán los Teletones, y lo que no esté regulado será el espacio para compensar la falta de spots. Por ahora Televisa echará mano de tele-novelas al gusto del cliente político.

Así Televisa para su capítulo Jalisco tiene preparada la telenovela “las estúpidas no van al cielo” y las tierras tapatías serán escenario de propaganda personal y electoral tanto del gobierno panista como de la imagen de Emilio González, quien a su vez estelarizará la comedia “los estúpidos si van a los Pinos…pero con dinero, parte III”.

Y es que Con-Dón Emilio ya quedo claro que Televisa tiene una partida asegurada en el presupuesto local, el año pasado regaló literalmente más de 67 millones de pesos a dicha empresa para la infraestructura logística y operativa del “Espacio de Emilio 2007”, comprometió y entregó además recursos públicos por más de 37 millones de pesos para la falacia “altruista” del Teletón. Claro, para la "telenovela" no comprometerá recursos públicos, faltaba más, pero si utilizará el aparato de gobierno para derivar dinero privado, como si esa fuera labor del gobierno y no nos costara a los contribuyentes dicha canalización.

De tal suerte que ahora les solicitará a los mismos padrotes que financiaron su campaña a la gubernatura recursos por un monto cercano a los 12 millones de pesos, pues a saber de Emilio González con esos recursos se promoverá financiera y turísticamente al estado, así como los valores católicos, la equidad de género y demás eufemismos. ¡Si, Por supuesto! Televisa ahora fungirá como la nueva secretaría de Turismo para Jalisco. Y nosotros que nos chupamos el dedo.

roblesgerman@prodigy.net.mx

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