Restos de la casa de Guadalupe Lara, derribada el pasado miércoles Foto: HECTOR JESUS HERNANDEZ
JORGE COVARRUBIAS
Para el derribo de la casa de Guadalupe Lara Lara, última habitante del poblado de Arcediano, se hizo con un procedimiento “legaloide”, y de “bajo nivel”, dijo la presidenta del Instituto de Derecho Ambiental (Idea), Raquel Gutiérrez Najera. Explicó que el amparo que fue interpuesto para evitar la demolición de la finca consideró todos los aspectos para que el gobierno estatal no tuviera la posibilidad de encontrar resquicios legales, sin embargo, no les importó y se erigieron en juez y parte.
Los grupos ambientalistas que apoyaron la causa de Lara Lara recurrirán ahora ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos para levantar una queja, al tiempo que buscarán entablar un juicio político para el gobernador del estado Emilio González Márquez, el director de la Comisión Estatal de Agua (CEA), Cesar Coll Carabias, y todos los funcionarios que resulten responsables de este acto.
“Nosotros pensamos que el lunes de la semana que entra tendríamos que estar interponiendo todas estas acciones jurídicas, no dar tregua a que pase más tiempo, y que obviamente con el respaldo de la señora Lupita Lara, la defensa jurídica continuará a favor de los que vivimos en esta segunda ciudad más importante de la república”, dijo Gutiérrez Najera.
En conferencia de prensa, los ambientalistas presentes acordaron solicitar de manera urgente el respaldo de organismos civiles y no gubernamentales tanto del interior del país, como del extranjero para divulgar la acción que tomó el gobierno del estado en aras de continuar con el proyecto de la presa de Arcediano.
“Esta provocación que hace el gobierno del estado va a ser respondida. Hemos venido actuando de manera pacífica, pero hay límites también; entonces se va a llegar a organismos internacionales”, comentó María González Valencia, representante del Instituto Mexicano para el Desarrollo Comunitario.
El martes, una comitiva viajará a la ciudad de Morelia, donde sesionará la Comisión de Cooperación Ambiental del Tratado de Libre Comercio, para solicitar la aprobación del expediente de hechos sobre la cuenca Lerma –Santiago–Pacífico, que incluye el caso de Arcediano, y posteriormente participarán en el foro del Tribunal Latinoamericano del Agua, a celebrarse en Guadalajara el próximo mes, cuya recomendación de esta última instancia el año pasado exigía la suspensión del embalse.
Mientras las organizaciones ambientales detallaban las acciones legales que emprenderá, el titular de la CEA, César Coll Carabias, declaraba a una estación de radio que en octubre comenzará la construcción de la cortina de la presa toda vez que se han resuelto los impedimentos jurídicos.
Por su parte, Guadalupe Lara Lara leyó un comunicado de cinco cuartillas al que tituló Reflexiones de una ciudadana, base de lo que será su próximo libro en el cual narrará desde el momento en que Arcediano comenzó a poblarse, hasta la persecución de sus habitantes.
“Con todo lo que me ha sucedido, desde gobiernos, periodistas, cardenales, familias y comunidad, dentro de poco quizás ustedes se darán cuenta de la voz de los afectados porque dónde está la voz, no se oye, el gobierno la opaca, la pisotea y no permite que salga, y yo soy esa voz y voy a hacer un libro de mi comunidad y ya lo tengo”, refirió.
Afirma que el proyecto de Arcediano es tan falso como las “mentes ambiciosas, negras como las aguas del río Santiago”, que pretenden levantar la presa, cuya obra tiene la finalidad de llenar de dinero los bolsillos de los gobernantes.
“Yo, como afectada por este falso proyecto me ha tocado enfrentar la verdad contra la mentira, la injusticia contra la justicia, el amedrentamiento de su prepotencia, sólo porque a mí no me engañaron desde un principio y comprendí sus abusos, sus mentiras, y un sinfín de falsedades”, dedicó estas palabras a los panistas.
“¡En Jalisco y Guadalajara…, todos somos Lupita Lara!”, corearon los asistentes al final de la reunión.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario