vídeo: Declaración de una de los sobrevivientesdel ataque a la carvana San Juan Copala.
En momentos en que se daba sepultura a la luchadora Alberta "Betty" Cariño Trujillo, asesinada por paramilitares en una emboscada a una caravana humanitaria, continúan desaparecidos cuatro integrantes de la misma.
Junto a la activista asesinada impunemente, resultó fallecido un ciudadano finlandés, Juri Jaakkola, que formaba parte de la expedición como observador internacional.
En tanto, permanecen desaparecidos dos periodistas de la revista Contralínea, David Cília y Erika Ramírez Pardo que realizaban una cobertura de la acción humanitaria con el objetivo del cese del acoso a una comunidad autónoma de indígenas trique, así como los miembros de VOCAL, David Venegas y Noé Bautista.
“Hoy damos sepultura a nuestra compañera y después de este acto comenzaremos otro tipo de acciones como organización. No hemos podido entrar al lugar de los hechos para comprobar el estado de esos compañeros desaparecidos porque el grupo paramilitar sigue actuando”, reportó Fernando Urbano.
Tanto el gobierno estatal como el nacional han hecho caso omiso de las exigencias para hacerse presente en el lugar, identificar y juzgar a los responsables, dijo Fernando.
Se trata del grupo paramilitar, de filiación priista, Unidad de Bienestar Social de la Región Triqui (Ubisort), según el periódico Contralínea. Los periodistas enviados buscaban documentar el asesinato de las locutoras triquis de la radio comunitaria La Voz que Rompe el Silencio, Felícitas Martínez y Teresa Bautista, ocurrido el 7 de abril de 2008 en una emboscada, también ejecutada por el grupo paramilitar Ubisort.
"Betty" Cariño formó parte de la creación de la Red Mexicana de Afectados por la Minería (Rema), de cuyo equipo coordinador formó parte desde su organización, CACTUS.
Fernando Urbano recordó a su compañera como “una persona muy alegre, muy comprometida y que siempre estuvo del lado de los pobres, de México y del mundo”.
Desde la organización continental Grito de los Excluídos se recordó a la luchadora mexicana como dueña de “una ética del compromiso que a todos nos enseñó la coherencia entre la palabra y la acción, madre, amiga, una verdadera luchadora del pueblo que con su entrega a las causas del pueblo será siempre un ejemplo vivo de militancia y dignidad”.
Y denunciaron lo que consideran una “guerra” desde el Estado hacia los movimientos sociales, a favor de las trasnacionales.
Desde Oaxaca, Fernando señala que el criminal hecho generó consecuencias a nivel internacional por la muerte del observador finlandés, así como una movilización de rechazo frente a la embajada mexicana en Finlandia.
San Juan Copala se ubica en el municipio de Juxtlahuaca, Oaxaca. Conformada por más de 700 habitantes, la comunidad se declaró autónoma el 1º de enero de 2007; desde entonces, enfrenta la violencia paramilitar derivada de la supuesta disputa de tierras.
“Ni en los países donde existe una guerra declarada se balea de esta manera a una caravana humanitaria que llevaba alimentos y buscaba romper el cerco en que se encuentran los pobladores de San Juan Copala”, explicó Fernando Urbano manifestando su indignación y reclamando un pronunciamiento internacional de repudio.
En video adjunto puede escucharse el testimonio de Mónica Citlali Santiago, una sobreviviente del ataque, sobre los hechos acontecidos el 27 de abril.
Foto: http://contralinea.com.mx/
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