Carlos Aguilar tiene 25 años y vive en el Estado de México. Es uno de los casi tres millones de desempleados que reconocen las estadísticas oficiales en el país: “En mi opinión personal –dice-la crisis económica significa hambre, desempleo, corrupción de nuestros gobernantes, mala administración de los recursos y pobreza”.
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La pobreza y el desempleo aumentan. Se siente en las calles, el campo, los mercados, las casas y las fábricas. Lejos de la realidad, desde la presidencia de México, Felipe Calderón, declara: “Tenemos unas finanzas públicas sanas, fuertes. Nuestros sistemas financiero y bancario están sólidos y, a diferencia de otros países, hoy México no depende más de la deuda externa. Tenemos la tasa de inflación más baja de América Latina. Nuestra economía sigue creciendo y generando empleos”.
Los testimonios del México de abajo hablan por sí solos:
Dolores Olvera, ama de casa: Todo a subido mucho, por ejemplo el arroz, el frijol, las verduras, el jitomate, el agucate, el tomate, el azúcar, que subió horrible, a 15 pesos cuando estábamos comprándola a 10… en realidad todo lo que según dicen que es la canasta básica, para nosotros de jodidos, está muy caro. Es un abuso, sobre todo que ya nos anunciaron que va subir el petróleo, la gasolina, el disel, la luz… qué otra cosa, la renta… Al subir la gasolina, que es lo básico, todo vuelve a subir un montón. Entonces díganme ¿cuál es el chiste de todo esto?
Le voy a decir una cosa, si de verdad nos llenáramos de valor habría una revolución como la hubo, pero a lo mejor ya nos pasa como a las cucarachas que con un insecticida y nos matan…. a los mexicanos nos falta corazón como al carrizo, para poder (hacer algo), no precisamente con guerras, sino con otra formas….En una ocasión yo leí en un periódico que en Estados Unidos había una tienda y que vendían no se que cosa, ¿jitomate?, no me acuerdo que cosa, pero que de un día para otro lo subieron bastante, entonces toda la gente de por ahí se unió y no compraron, y al ver los de la tienda que se les estaba echando a perder lo bajaron. Si nosotros como mexicanos nos uniéramos en ese aspecto me canso que si nos bajaban las cosas.
Carlos Aguilar, desempleado: Yo trabajaba en una empresa que se dedicaba a la fabricación de muebles para oficina y al personal de confianza nos renovaban nuestros contratos. No nos hacían contratos largos para que no hiciéramos tiempo en la empresa y no hiciéramos base. Un día común y corriente llegó mi jefe directo a decirme que ya no me iban a renovar mi contrato el siguiente mes, porque iban a hacer un despido masivo y pues iban a despedir a cerca de 87 trabajadores, entre personal de confianza y sindicalizado. Esto debido a que ya no tenían ningún recurso para poder seguir pagando los sueldos y que solamente se iban a quedar con las estructuras, esto quiere decir que sólo se iban a quedar con los puestos claves, para poder sacar el mínimo de producción, y a toda la gente que hacía que se diera como un plus (aumento extra) en la producción la iban a despedir. Simplemente se terminó el mes en que se vencía la fecha de nuestro contrato. No nos hicieron firmar nada de renuncia, ni de que ellos nos corrían como normalmente ocurre. No hubo indemnización, no hubo nada más que: “Gracias, nos vemos pronto”. Y ya.
Los sueldos que ofrecen son realmente muy bajos. Acabo de ir a pedir trabajo a un Samborns y me dijeron que me iban a pagar 400 pesos a la semana, y que tenía que laborar los 365 días del año, con un día de descanso a la semana. Con 400 pesos no puedes mantener a una familia y con trabajos te alcanza para ir sobreviviendo y comprar algunos alimentos en el día y tus pasajes que te gastas para poder ir a tu trabajo.
En el México de arriba parece que nadie se quiere dar cuenta de nada.
::Democracia Ya, Patria Para Todos. Apoyando al Lic. Andrés Manuel López Obrador en 2009::
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