◗ Una del espurio
◗ Una de El Católico
La Jornada Jalisco
A ver a ver a ver. El ¿presidente? autista Felipe Calderón (ensimismado en su mundo particular en el que lo protegen las bayonetas a dondequiera que va) ayer dijo en el búnker del Instituto Cultural Cabañas que el primer trimeste del 2008 la inversión en gasto público ejercida por el gobierno federal ha sido 100 por ciento mayor a la del primer trimestre del año pasado. Y su ejemplo principal fue Jalisco.
“Aquí en Jalisco tenemos obras muy, muy comprometedoras que van a ayudar al estado. Ahí me ayudará a corregir el gobernador, pero estamos haciendo, precisamente, el Periférico, completando el Periférico de la ciudad de Guadalajara; haciendo un libramiento completo nuevo que va a permitir conectar las carreteras que van hacia Tepic y Vallarta, con las carreteras que van hacia el oriente del país, en Guadalajara. Estamos invirtiendo y desarrollando los proyectos para conectar directamente la vía tranviaria de Guadalajara a Aguascalientes sin tener que desviarse hacia Irapuato. Estamos también ya corriendo el proyecto ejecutivo para ampliar la carretera Guadalajara-Colima a cuatro carriles en toda su extensión. Estamos, y vendré, espero próximamente, a lanzar el proyecto hidráulico e hídrico de la Zona Metropolitana de Guadalajara que implica obras de tratamiento de aguas residuales, nuevas obras de acceso de agua potable, en fin, darle una solución integral a esta gran ciudad de Guadalajara”, enumeró el hombre que de la mano de los poderes fácticos del país se agandalló la silla presidencial este sexenio.
Pero resulta que ni el Periférico, ni el Macrolibramiento, ni el famoso tren de La Chona a Aguascalientes, ni la terminación de la autopista Manzanillo-Guadalajara, ni el proyecto hidrosanitario que tiene como punto culminante la presa de Arcediano están en proceso de obra, aunque eso sí, ya se han llevado muchos millones de pesos en los estudios esos que siempre se llevan muchos millones porque así es la obra pública.
Que venga Calderón con su Ejército de malencarados, vallas, bayonetas y tanquetas es de por sí insoportable para el ciudadano común, que sufre el ejercicio desmesurado del autismo ¿presidencial? Pero que venga a entregar espejitos demagógicos donde el reflejo habla de una realidad que no existe más que en su discurso chistosito es punto y aparte. No fue lo único, también habló de la imperiosa necesidad de evitar que los gringos nos chupen por debajo el oro negro de las aguas profundas del golfo (no es albur, es más bien el petate del muerto sacudido) y que por ello la privatización de Pemex debe ser una prioridad por el bien de México, México, ra, ra, ra.
Y como para no desmerecer en la demagogia, también Emilio El Católico sacó sus cuentitas alegres en el búnker del Cabañas y habló de todo lo que su gobierno hace por el bien de Jalisco, entre ellas lograr corporativizar a favor de su administración panista a las centrales sindicales como la CTM, la CROC o la CROM, el triunvirato dizque priísta, en el “acuerdo por la estabilidad laboral” cuyos mejores logros son “la disminución en las solicitudes y en los emplazamientos a huelga”, porque uno de las principales defensas que a su juicio se puede hacer de los trabajadores al evitar paros laborales es “la preservación de la fuente laboral”. Y luego, en su discurso del sindicalismo moderno y ad hoc, la letanía: “Queremos ser ejemplo a nivel nacional de cómo se cuidan los derechos de los trabajadores y cómo se cuida, también, el empleo”.
Vino entonces su intervención de la promoción del turismo en todas sus vertientes, con énfasis por supuesto en el turismo religioso que dice promueve su gobierno al comprometer recursos públicos en una obra faraónica para festinar a los cristeros convertidos en mártires y santos. Pero, previo a ello, habló de lo que dijo es “turismo cultural” en la expresión jalisciense wixárika a quienes, afirmó, se les apoya mediante la inversión en promoción y en infraestructura. ¿Qué no está detenida la carretera que violó el territorio ancestral wixaritari? ¿Qué no hay, en estos momentos, cientos de huicholes plantados desde hace más de un mes en protesta porque el gobierno estatal les destruyó sitios de recogimiento espiritual destino de peregrinaje por cientos de años? ¿Entonces por qué mete a la olla algo que ha sido, como en muchos otros casos de su todavía corta administración, frijoles saltarines?
Partidiario
Ya la Iglesia La Luz del Mundo ofrece su postura oficial en la edición de este martes, entre ellas que “no es el órgano competente para juzgar las acciones de las autoridades de gobierno”. Se refiere a la macrolimosna, por supuesto, y aclara que sus apoderados legales y voceros “no contemplan emprender acción alguna al respecto”. Lo que sí deja libre la posibilidad de que sus miembros, como ciudadanos libres que son, puedan ejercer a título personal esa potestad de inconformidad. Y sabemos de cientos de jóvenes indignados que estudian en las escuelas de esta asociación religiosa, quienes lo harán en esos términos…
Por fin la Secretaría del Trabajo ofreció resultados, así fueran escuetos, de un análisis que le llevó casi trece meses realizar a su titular, Ernesto Espinosa Guarro, para determinar el estado que guarda Jalisco en materia laboral. En números gruesos es que de los mil 700 sindicatos registrados, 300 no han renovado sus directivas en el lapso que les corresponde, y entre 600 y 7000 “están en desuso y fuera de servicio”, mientras que otro –cifra sin precisar– tendrán que hacer un proceso interno de revisión estatutaria o reposición de documentos ante el registro de la ST. Pero lo principal, ese corporativismo del que habló el gobernador, fue que se logró disminuir el número de solicitudes de huelga presentadas por las organizaciones que cada día se convierten más en sindicatos blancos. “Los acuerdos están funcionando”, presumió el secretario como el gran logro en la materia…
En el gobierno estatal andan preocupados por la reacción de “las minorías” ante la macrolimosna. Algunos de sus funcionarios preguntan a quienes tienen cierto peso específico en la opinión pública su valoración respecto a la decisión del gobernador, es decir, la flagrante violación al principio constitucional de laicidad. Quién sabe cómo anden esas encuestas de las mayorías, encuestas que por cierto no han aparecido por ningún lado, que ahora a palo dado les preocupa que los golpeados griten por el golpe. Ya hay antecedentes de un par de decisiones rectificadas por Emilio González, la del impuesto para el bosque de La Primavera y la del placazo. Pero ahora hablamos de una de las principales debilidades (fortalezas, diría él) del gobernador: su religión. Y por ello la esperanza de una marcha atrás, a pesar del tumulto de las minorías encabronadas, hace prever que sería más fácil a un camello pasar por el ojo de una aguja que esperar que los dineros fueran regresados a sus legítimos dueños para utilizarlos en cualquiera de las múltiples necesidades terrenales que tienen desperdigadas por todos los rincones de este Jalisco medieval al que nos quieren regresar
garciapartida@yahoo.com.mx::Democracia Ya, Patria Para Todos. Apoyando al Peje en 2008::
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